El P. Antonio González Callizo nació el 16 de enero de 1918 en Zaragoza. Ingresó a la Compañía de Jesús en el Noviciado de Aranjuez en 1950, con 32 años de edad, siendo una de las escasas vocaciones tardías que se daban en aquellos años.
Antes de ser jesuita, estudió parte de la secundaria en Pau (Francia) y cursó estudios en la Escuela de Altos Estudios Mercantiles (1931-1936) en Madrid donde le sorprendió el comienzo de la Guerra Civil española. Aunque fue alistado al ejército republicano, no pudo incorporarse por una enfermedad. Acabada la guerra, retoma los estudios interrumpidos y ejerce la profesión de perito mercantil durante 9 años. Tras ganar unas oposiciones, de 1944 a 1950, trabaja en el Instituto Nacional de Previsión, el seguro social público de aquella época.
Conoció a la Compañía de Jesús en unos ejercicios espirituales donde tuvo una fuerte experiencia vocacional y decidió dejar su exitosa vida profesional para ingresar en el noviciado de Aranjuez en 1950. Llegó al Perú para hacer el segundo año de Noviciado en Miraflores donde también realizó el Juniorado de 1952 a 1953. Regresa a España para realizar los estudió de Filosofía en Madrid (1953-1955) y Teología en la facultad de Granada (1955-1959) sin pasar por la etapa del magisterio. Fue ordenado sacerdote en 1958 en Madrid y completó su formación con la Tercera Probación en Mont Laurier y St Jerome (Quebec-Canadá).
Desde que se incorporó a la vida activa, gran parte de su trabajo estuvo vinculado a temas administrativos y económicos, aunque, en su misión, siempre ocupó un lugar relevante el ejercicio del ministerio sacerdotal. En cuanto regresó a la Viceprovincia, en 1961, fue nombrado ecónomo y administrador de casas y obras hasta 1968 residiendo en la comunidad Nuestra Señora de Fátima. Ese mismo año fue destinado a la Curia General en Roma como ayudante del ecónomo General donde permaneció 20 años.
Acabado su servicio en Roma en 1988, se incorpora a la comunidad de San Pedro en la que permanece hasta 2014. En esta etapa mantiene alguna colaboración en el ámbito económico (algunos años de revisor de arcas y consejero de la comisión económica), pero su actividad central será la pastoral en tres líneas principales: vicario parroquial, confesor y dirección de ejercicios. Sin duda, el ministerio en el que más se distingue, es en el sacramento de la reconciliación. También, durante todos estos años, fue Secretario Nacional del Apostolado de la Oración.
Antonio era el jesuita decano de la Provincia. Cuando llega a la Enfermería en 2014 con 96 años, su salud todavía es buena, salvo los problemas de vista, y, por ello, se mantuvo en actividad en la medida que sus fuerzas lo permitían. En ese tiempo, siguió recibiendo a muchas personas para la confesión, especialmente religiosas y seminaristas o era llevado a los conventos para confesar. Sin embargo, su salud decayó de forma súbita hace una semana y falleció en la tarde del día 9 de septiembre, de un ataque cardiaco.
Del P. Antonio cabe destacar su gran identidad sacerdotal y una especial capacidad de acogida y de transmitir paz, dones que le convertían en un sacerdote muy requerido para el sacramento de la reconciliación. Era un hombre bondadoso, que vivía agradecido a Dios y a la Compañía y lo manifestaba de forma permanente a su entorno. Entregó su vida hasta el final como un operario fiel en un sencillo servicio cotidiano.
Demos gracias a Dios por su vida ejemplar, de entrega apasionada al Señor, anunciando siempre su Palabra, y la confianza en el cariño maternal de María.
ME DUELE VOLVER A ESCRIBIR EN ESTA PÁGINA POR LA PARTIDA A LA CASA DEL PADRE DE OTRO SANTO JESUITA, ESTA VEZ SE TRATA DEL PADRE ANTONIO GONZÁLEZ CALLIZO SJ QUE NOS DEJÓ EL PASADO VIERNES 9. CONOCÍ A ESTE PADRE EN SU CONFESIONARIO QUE ERA EL SEGUNDO A LA MANO IZQUIERDA MIRANDO AL ALTAR MAYOR, COMO ANÉCDOTA PUEDO CONTAR QUE CUANDO EL PAPA BENEDICTO XVI SI MAL NO RECUERDO EN EL 2009 DIJO QUE SI UNA PERSONA QUE PADECE CUALQUIER ETS ESTÁ DECIDIDO A TENER UNA RELACIÓN SEXUAL CON EL PELIGRO DE CONTAGIAR A SU PAREJA SERÍA MEJOR QUE USARA UN PRESERVATIVO Y SE LO CONTÉ AL PADRE, ME PREGUNTÓ ¿DÓNDE TE HAS ENTERADO DE ESTO? LE CONTESTÉ QUE EN UNA RADIOEMISORA LOCAL DONDE AFIRMARON DE ACUERDO A ESTO QUE LA IGLESIA YA HABRÍA ACEPTADO EL USO DE PRESERVATIVOS, ME DIJO QUE EN PRIMER LUGAR DEBÍA BUSCAR UN MEDIO VÁLIDO PARA DAR POR CIERTA UNA NOTICIA SOBRE UNA DECLARACIÓN DEL PAPA Y ME EXPLICÓ QUE DECLARACIONES DE ESTE TIPO DEBEN ENTENDERSE DENTRO DEL CONTEXTO EN QUE SE DIERON, ES DECIR YA ESTABA ENTERADO DE LO QUE LE CONTABA Y ME DIJO CÓMO DEBÍA ENTENDER ESTO. SIEMPRE LO VEÍA “APURADO” Y SU MENUDA FIGURA SE PERDÍA RÁPIDAMENTE POR ENTRE LAS COLUMNAS DEL TEMPLO. ERA UN PADRE QUE SE DABA SU TIEMPO PARA EXPLICAR A LOS PENITENTES LA NATURALEZA DE SUS PECADOS Y PRONTO A ABSOLVER CUALQUIER INQUIETUD. LA ÚLTIMA VEZ QUE ME CONFESÉ CON EL FUÉ EL 27 DE JULIO DEL 2013 – LO TENGO ANOTADO – Y DE ESA FECHA YA LO VÍ POCAS VECES, LAMENTO MUY DE VERAS SU AUSENCIA FÍSICA Y HAGO LLEGAR MI PESAR A TODA LA COMUNIDAD JESUITA DE SAN PEDRO, AHORA REZO POR EL PERO CON LA CERTEZA QUE POR LA COMUNIÓN DE LOS SANTOS EL ESTÁ AHORA INTERCEDIENDO POR MÍ DESDE LA CASA CELESTIAL DONDE AHORA GOZA DE LA VISIÓN BEATÍFICA DE LA SANTÍSIMA TRINIDAD. GRACIAS POR TODO PADRE ANTONIO.
Tuve la fortuna de confesarme con este sacerdote en la Iglesia San Pedro. Era un confesor extraordinario, porque te explicaba si lo que decías era o no pecado. Uno salía realmente con una paz interior gratificante. Pude decirle al final de una confesión, que era el mejor confesor que había conocido. Ojalás que hubieran muchos sacerdotes como él.
CONOCÍ AL PADRE ANTONIO GONZÁLES CALLIZO. S.J. SEGÚN RECUERDO EN 1995. ME LO RECOMENDARÓN, PORQUE ERA UN SACERDOTE DOTADO DE MUCHA HUMANIDAD Y SABIDURÍA, PUES TENÍA CAPACIDAD DE DISCERNIMIENTO, ADEMÁS APLICABA MUCHO LA PSICOLOGÍA CUANDO TENÍA QUE RESOVER DUDAS POR TEMAS DE ESCRÚPULOS. REALMENTE AMABA SU MINISTERIO Y FUÉ COMO UN PADRE PARA MÍ. A ÉL DEBO MUCHO MI FORMACIÓN DOCTRINAL, ASÍ COMO CIMENTAR MIS CONVICCIONES DE FÉ.
RECUERDO QUE TUVE LA SUERTE DE QUE ME DIERA EJERCICIOS ESPIRITUALES. AL PROPIO TIEMPO MI ETERNA GRATITUD Y RECONOCIMIENTO COMO HIJA ESPIRITUAL, QUE ME LLEVÓ A PEDIRLE QUE SI ALGUNA VEZ UNO DE LOS DOS, ERA PRIMERO LLAMADO A LA CASA DEL PADRE, NO OLVIDARNOS NIUNCA DE ENCOMENDARNOS ÉL UNO POR EL OTRO, A FIN DE OBTENER DE DIOS LA SALVACIÓN.
PUEDO DECIR QUE LO QUIERO MUCHO Y ÉL REALMENTE FUÉ MI VERDADERO PADRE, EL CUAL ME FORMÓ Y FORJÓ EN MUCHOS ASPECTOS DE MI FÉ CATÓLICA.
SIEMPRE SOLÍA VISITARLO EN LA CASA CONVENTO DE SAN PEDRO EN EL JR. AZÁNGARO, CERCADO DE LIMA. ACUDÍA A ÉL COMO UNA HIJA A UN PADRE Y CREO QUE NI POR MI PADRE BIOLÓGICO LLORARÍA TANTO COMO LO HICE POR MI PADRE ESPIRITUAL, ANTONIO GONZALES CALLIZO.
VEÍA SU SUFRIMIENTO DE SUS ULTIMOS AÑOS CUANDO SE QUEDÓ SIN VISTA, PUES EL SIEMPRE ERA MUY ACTIVO, Y LA CEGUERA LO REDUJO EN MUCHAS DE SUS ACTIVIDADES. PUEDO DECIR QUE ES UN SANTO SACERDORTE, AL CUAL TUVE LA FORTUNA DE CONOCER Y DE DEJARME ACONSEJAR Y DIRIGIR, A PESAR DE MIS IMPERFECCIONES. FUÉ TODO UN LUJO Y REGALO DE DIOS EL QUE ME HAYA CONCEDIDO LA GUÍA Y EL APOYO EMOCIONAL, ESPRRITUAL E INTELECTUAL DE MI QUERIDO PADRE CALLIZO, COMO SOLÍAMOS LLAMARLO MUCHOS, PUES INCLUSIVE ÉL ERA MÁS CONOCIDO POR SU APELLIDO MATERNO.
ERA MUY DOCTO EN GUIAR ALMAS Y REALMENTE DEJÓ UN GRAN VACÍO, POR ESO MUCHOS LO BUSCABAN Y LAS FILAS DE ESPERA ERAN SIEMPRE MUY LARGAS EN SU CONFESIONARIO. NO LE GUSTABA DEJAR AL ALMA DESCONSOLADA O QUE SE VAYA DE SU CONFESIONARIO CON DUDAS, TEMORES Y CONFUSIONES, YA QUE ÉL MISMO EN ALGUNA OPORTUNIDAD, ME COMENTÓ QUE HABÍA SUFRIDO TODO ESO, POR ELLO CONOCÍA ESE TORMENTO ESPIRITUAL Y LO COMBATÍA EN TRATAR DE QUITÁRSELO AL ALMA ATORMENTADA, A FIN DE QUE SIENTA EL CONSUELO, LA MISERICORDIA, LA PAZ Y TRANQUILIDAD, QUE DIOS REGALA CUANDO CONSUELA AL ALMA, EN EL SACRAMENTO DE LA CONFESIÓN.
SALUDO SU INTELIGENCIA Y SU CAPACIDAD PARA EJERCER SU MINISTERIO. TUVE LA BENDICIÓN DE LLEGAR A VERLO EL ÚLTIMO DÍA QUE LO VELABAN EN LA CAPILLA INTERNA DE LA CASA JESUITA DE LA IGLESIA DE FÁTIMA EN ARMENDARIZ, MIRAFLORES, DONDE PUDE DESPEDIRME Y PARA MI TAMBIEN FUE COMO UN MILAGRO DE ENTERARME QUE HABÍA FALLECIDO, YA QUE POR AQUELLOS MESES TUVE INCONVENIENTES, POR LO CUALES DEJÉ DE VISITARLO. ENTONCES A TRAVÉZ DE UNA CONOCIDA PUDE ENTERARME DE SU PARTIDA. FUÉ COMO SI EL PADRE INTERCEDIERA POR MI, PARA QUE DIOS ME CONCEDA VISITARLO POR ÚLTIMA VEZ, YA QUE HUBIERA SIDO PARA MI TERRIBLE NO PODER ESTAR PRESENTE EN SU VELORIO.
CABE RESALTAR SU ENTREGA A SU MINISTERIO Y SACRIFICIO, POR ESO CONFÍO EN QUE ESTÁ CON DIOS EN SU GLORIA Y DESDE ALLÍ VUELVO A PEDIRLE QUE ORE E INTERCEDA POR MI ALMA, POR MI FAMILIA, SERES QUERIDOS, POR MI PATRIA Y POR LA SALVACIÓN DE LA HUMANIDAD.
MÁS BIEN, PIDO DISCULPAS EN RECIEN ESCRIBIR MIS RECUERDOS. SOLO QUE EN UN PRIMER MOMENTO, NO RELACIONÉ EN ESCRIBIR MIS MEMORIAS SOBRE ÉL, PERO AHORA QUE VEO OTROS TESTIMONIOS, ME HAN HECHO REFLEXIONAR QUE DEBO APORTAR EN QUE SE DIFUNDA EL TESORO QUE DIOS REGALÓ A LAS ALMAS, A TRÁVEZ DEL SACERDOTE JESUITA, ANTONIO GONZÁLES CALLIZO.